martes, 1 de septiembre de 2009

Quince días

Cada vez que pienso en que dentro de dos semanas a estas horas estaré intentando dormir (sin conseguirlo) y a unas horas de coger ese avión que va a cambiar mi vida, los nervios me invaden. Y no son el tipo de invasión que quería. Pero pensar en cómo comprimir todas mis cosas en 20 kg, en dónde vivir los primeros días, en si no volverán a quitarme esa casa que me encanta, en que tengo que despedirme de todo el mundo...

Pero es entonces cuando pienso en que va a ser genial conocer otra ciudad, gente nueva (sin olvidar a los "viejos" amigos de aquí, aunque me pase el día diciéndoles que les odio...

Y es que después de haber esperado hasta el último año para pedirlo, por unas cosas y por otras, quiero irme. Aunque tenga miedo. Ahora ya no hay vuelta atrás. Ahora ya me voy a pasar los próximos once meses en una ciudad que, según algunos, está habitada por pingüinos. Adoptaré uno. Y si las cosas no cambian mucho entre hoy y mañana, viviré sola. Para fomentar la fama de antisocial que yo misma me doy y que los demás se empeñan en negar.

Lo dicho. Me voy a pasar los próximos once meses en Turín. Y aquí os voy a contar cómo es la vida de una Erasmus en Turín. Si no me muero antes de hambre, claro.

4 comentarios:

  1. No te mueras de hambre niña, y sobre todo, no vendas tu cuerpo por 10 cochinos euros...

    ResponderEliminar
  2. Jajajajaja. Claro. Ya que lo haces, se de las de lujo, joder.

    ResponderEliminar
  3. uhm... entonces podría buscarme una buhardilla más grande...no?
    bueno, y comer todos los días...xD

    ResponderEliminar